Desafiando a los problemas de seguridad, los fieles y turistas que se dan cita desde el viernes 11 hasta el domingo 20 de agosto a la fiesta de san Jacinto de Yaguachi, demuestran que la fe está por encima de todo. Aunque eso signifique, que si va para también divertirse, su visita no sea hasta altas horas de la madrugada.
Para este 2023, en la fiesta de san Jacinto de Yaguachi, los espacios para bailes, comida, dulces y juego mecánicos que se ubican en las principales calles del cantón, están abiertos solo hasta antes de las 21:00. La causa: la crisis de seguridad, producto de conflictos entre organizaciones criminales con conexión al narcotráfico.
Sin embargo, la expresión de religiosidad, tradiciones y farra que se vive en la fiesta de san Jacinto de Yaguachi es más fuerte que cualquier ambiente de tensión. La comunidad vive las masivas fiestas populares y religiosas, encomendándose al también conocido “Santo andariego” como intercesor de la paz que urge en el cantón.
Aquí una transmisión en vivo del componente religioso:
Llamado a tener fe
Durante todo agosto, Yaguachi abre sus puertas a fieles y turistas de todo el país, que llegan para celebrar con fe y paganismo a san Jacinto, un santo de Polonia cuya imagen es muy venerada.
La devoción es notoria, aún en tiempos de inseguridad. Por ejemplo, el fin de semana del 11 al 13 de agosto, los visitantes aprovecharon los días de asueto nacional para visitar el templo religioso y recorrer un tramo de 12 cuadras repletas de variedad de emprendimientos.
Dustin Salazar, vicario episcopal de San Jacinto, comenta que la inseguridad en Ecuador ha impactado en la religión de varias maneras, incluida la cancelación de peregrinaciones y una notoria ausencia de fieles católicos en los centros religiosos.
“No es el caso de Yaguachi, ya que la comunidad religiosa se ha unido para una posible celebración. Se nos escapa de las manos el tema de la seguridad, solo nos queda pedir por la paz no solo de Yaguachi, sino de todo un país que vive días de angustia. Esta novena, romería y misas son ofrendas para nuestra paz”, expresa.
Salazar señala que la catedral de San Jacinto estará abierta todos los días de fiesta como un espacio seguro de oración para quienes lleguen a pedir por la paz del mundo e inclusive dar las gracias por los favores recibidos.
“Y como dice la canción de nuestro patrono, solo hay que tener fe como un granito de mostaza, porque por nuestra fe seremos salvados ”, señala.
Romería de fieles del país
En estos días de fiesta, cientos de fieles llegan hasta la catedral de san Jacinto de Yaguachi para enaltecer con aplausos al santo y acompañar en la procesión por un trayecto de casi cuatro horas.
Alejandro Arreaga, oriundo del cantón, exterioriza que solo Dios y la fe pueden darles la calma que necesitan. “Han sido meses difíciles, con muchas pérdidas humanas injustas, pero nos queda confiar en que san Jacinto bendecirá a su gente, en especial a nuestros niños. La tradición del yaguacheño no se puede perder”, dice.
Es así como los balcones de algunas casas lucen engalanados para recibir con pétalos de flores a la imagen de san Jacinto la cual es cargada en hombros por jóvenes y adultos que por años cumplen con su penitencia.
Con la imagen principal salen en procesión otras imágenes religiosas, entre ellas san Antonio de Padua, la virgen del Rosario y otro san Jacinto pequeño, que es sostenido por los niños del cantón.
Desde los balcones caen pélatos de rosas, mientras en la calle, san Jacinto avanza en medio de cánticos.
La peregrinación diaria es desde las 15:00 hasta las 18:30; los rezos, plegarias y cánticos religiosos bailables se vuelven un eco.
La noche del 16 de agosto es la procesión mayor. Empieza a las 20:00 y finaliza a las 00:00 entre la quema de castillos y pirotecnia. Esta última aún no está confirmada debido a los continuos enfrentamientos violentos que se dan por las noches en el cantón.
Dulces y artesanías no faltan
Quien visita Yaguachi en su mes de festividades religiosas no podrá irse sin antes comer una variedad de dulces.
Variedad de dulces de membrillo, rosquillas, dulces de manjar y melcochas atraen la atención de quienes estos días hacen turismo religioso en Yaguachi. El exquisito olor proviene de los puestos que se instalan desde mediados de julio hasta finales de agosto, época en que el cantón se viste de fiesta.
Hay dulces desde diez centavos de dólar hasta 10 dólares. Los precios varían según el dulce y gusto del cliente que se asocia con las tendencias. Por ejemplo, hay productos con dedicatorias como la tóxica, chulla vida, para mi suegra, ex de verdad, entre otras.
También se ofertan artesanías como cuadros religiosos, pulseras, collares, carteras, alcancías y otros. Además, venta de ropa y comida típica como el llapingacho, cuy asado, seco de pato y fritada.
No faltan tampoco los bares y pistas de baile improvisados en tramos de calles cerradas. El público baila y disfruta al ritmo de la cumbia, salsa, raeguetón, tecnocumbia, tecnochicha y otros géneros.
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Pendientes de la seguridad
En pleno apego al estado de excepción dictado por el presidente de la República, Guillermo Lasso, a través del decreto N° 841 del 10 de agosto de 2023, la alcaldesa de Yaguachi, Viviana Olivares, ha requerido con urgencia la intervención militar y el incremento de agentes policiales.
“Mi petición, dirigida al gobernador de la provincia, se realiza en aras del resguardo de la integridad y tranquilidad de nuestros conciudadanos yaguachenses. Queremos festejar nuestra fiestas patronales de la debida manera e invitamos a la ciudadanía en general a que sea portavoz de todo lo bueno que tiene Yaguachi”, dice la alcaldesa.
Recalca que el gobernador de la provincia del Guayas, Francesco Tabacchi, se comprometió a brindar protección y seguridad en los días de fiesta en honor al patrono san Jacinto de Yaguachi. (I)
